Vistas de Montserrat de Laborde

Louis-Joseph-Alexandre de Laborde (Paris, 1773-1842) fue un personaje polifacético y excepcional que hacía de su vida una improvisación constante. Fue militar, diplomático, administrador civil, diputado, economista, alcalde, pero sobre todo erudito, artista, arqueólogo e historiador. En 1792, su padre, que era banquero de Luis XVI, fue guillotinado y su madre y su hermana, encarceladas. Alexandre, que entonces estudiaba en Viena, pudo escapar. En aquellas circunstancias empezó sus numerosos viajes entre los que, como dijo él mismo, visitó Cataluña por primera vez. En 1797 pudo volver a Francia y obtuvo la protección de Luciano Bonaparte, con quien se instaló en Madrid entre 1800 y 1803 como agregado de embajada. En este tiempo viaja por toda España con un equipo de dibujantes que sacaron una multitud de dibujos que posteriormente servirán para la composición de las estampas de su Voyage pittoresque en Espagne, en cuatro volúmenes editados en la imprenta de Pierre Didot de Paris entre 1807 y 1818. El emperador Napoleón agregó Laborde a su cortejo como experto en temas españoles cuando visitó Madrid en 1808; la esposa de Laborde fue nombrada dama de honor de la emperatriz Josefina y él mismo, que era oidor de Estado, recibió del título de conde imperial. Pocos meses después empezaba en España la Guerra de Napoleón y, por lo que refiere a Montserrat, casi todo lo que Laborde había mandado dibujar, las tropas francesas comandadas por el general Suchet lo derribaron y redujeron a ruinas.